domingo, 10 de julio de 2011

Ciprínidos: la carpa

  La familia de los ciprínidos está constituida por peces de cuerpo alargado y tienen  aspecto fusiforme. En el dorso se encuentra solamente una aleta, como también sucede en la familia de los salmónidos.
   Por otra parte hay un detalle muy curioso, y es que sus dientes no aparecen en la mandíbula si no en la faringe. Son, como una especie de huesecillos en cadena y que también alcanzan con el oído y la vesícula natatoria, y por esta causa hasta las más pequeñas vibraciones  son percibidas a  través de la vejiga.
   Viven en charcas, lagos, embalses,  pantanos, ríos etc... ya que son peces muy poco exigentes, toleran bastante bien aguas poco oxigenadas y turbias. Son resistentes voraces y enérgicos por eso mismo son muy adecuados para la pesca deportiva.
   Entre los ciprínidos unos de los mayores protagonistas son las carpas (Ciprinus  carpio). Este ciprínido tiene una apariencia bastante alargada, y que presenta dos barbillones  uno a cada lado de sus labios. Tiene una aleta en su dorso impar bastante desarrollada más alta en su borde anterior que en su extremo posterior; También tiene otra aleta, la “anal” que está situada en la parte posterior de su cuerpo muy cerca de la caudal.
   En cuanto a su coloración es muy elegante con colores pardos y en la zona ventral amarillo anaranjado. La aleta dorsal en la parte superior de la caudal es más oscura y las situadas en la parte inferior, tanto las pares como la anal son de color rojizo.
   La carpa prefiere vivir sin duda en aguas tranquilas y cenagosas, con abundante vegetación  en las orillas o sus proximidades,  es ahí donde encuentran la temperatura idónea,  no le gusta excesivamente las aguas superficiales, prefiere las aguas comprendidas entre los 2 y los 6 metros.  Es muy raro que abandone su territorio habitual a no ser en primavera para preparase para la reproducción. La carpa desova  en aguas poco profundas y más limpias a ser posible que su residencia habitual, el número de huevos está entre  centenares  y un millar. Su desove es en la orilla sobre las algas, piedras etc... un detalle bastante curioso  lo hace  el proceso de fecundación, cuando las carpas depositan sus huevos  los machos se precipitan rápidamente a fecundarlos.                                                                                                                                                                       

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